Etapa 36. Breve viaje antes de un merecido paréntesis

Domingo, 21 de agosto de 2016.

‘‘No fueron tan vanas nuestras oraciones, que no fuesen oídas del cielo; que, en nuestro favor, luego volvió el viento tranquilo el mar, convidándonos a que tornásemos alegres a proseguir nuestro comenzado viaje.” (Cap.XLI, 1ª parte de “El Quijote”)

Mañana de domingo curiosa. Desayunas dos veces, una con tus compañeros de juerga de la noche anterior que no quieren dejarte marchar sin ofrecerte un tentempié para empezar el día; y otro refrigerio al llegar a Imsk donde tus anfitriones te esperan con la mesa puesta (se trata de Edgar y Verena, una pareja alemana que vive en el Tirol austriaco) .

En el camino muchos cicloturistas que te saludan con el tradicional “guten morgen” al que tú respondes en un alemán que empiezas a ir haciendo tuyo.

Y así llegas a la ciudad de Imsk, una localidad que se encuentra a orillas del río Eno. Ya en el siglo XIII obtuvo licencian para mantener un mercado regular y los plenos derechos de ciudad le fueron otorgados en 1898. Como curiosidad, en 1949, Hermann Gmeiner fundó la primera Aldea Infantil SOS del mundo en esta villa.

Llegado a tu objetivo replanteas tu situación: deseas ir al Seminario sobre el “Rol de las Organizaciones Humanitarias con los Refugiados” que se celebra en Ljubljana (capital de Eslovenia) que empieza esta semana, el cansancio de estos días con las subidas a los Alpes tiroleses carga sobremanera tus piernas,… Por todo esto decides hacer un paréntesis en tu aventura. Dejarás a Penélope en casa de tus anfitriones en Imsk, acudirás a Liubliana y                          participarás en el seminario internacional y, tras unos días, regresarás de nuevo al punto donde te encuentras hoy para proseguir la faena.

De esta manera además de participar en una acto interesantísimo para forjar el aspecto antropológico de tu empresa, digerirás los sucedidos en este último mes y medio y cargarás las pilas para futuros episodios aventureros en tu papel de perlé herenciano.

Así, a primeros de septiembre, como tú dices “volverás a la cancha” y a continuar tu periplo carnavalero para seguir por Europa atisbando la pronta llegada del continente asiático.

Breve crónica la de hoy con la que nos despedimos unos días. Ánimo Elías, recarga tus energías y más pronto que tarde seguiremos conociendo de tus pormenores viajeros.

Para despedirnos de esta crónica que mejor que transcribir el mensaje que Stefan y Philpp han puesto en facebook sobre la experiencia compartida contigo en la estación de esquí de Santk Anton.

“Philipp y yo estábamos sentados en la noche del viernes en la terraza de un restaurante cerca de la carretera del paso Arlberg.

Nuestro plan era comer y después dirigirnos a la aldea de Zürs y empezar a ascender una montaña para hacer cumbre en el siguiente día.

Vimos a Elías pasando completamente cargado con su bicicleta, sin embargo nosotros seguimos terminando nuestra comida y cogimos nuestro coche. Unos minutos más tarde, vimos a Elías en la carretera, comiendo unos aperitivos y preparándose para el ascenso al paso de Arlberg.

Después de contactar con él le contamos nuestros planes y Elías inmediatamente se entusiasmó por estos planes y nos preguntó si podía unirse a nosotros. Le dijimos que por supuesto, ya que estábamos curiosos de sus planes de recorrer en bicicleta el trayecto de España a Nueva Zelanda.

El resto de la historia: Buenas conversaciones, momentos maravillosos en las montañas y saber que hemos constituido un pequeño fragmento en una gran aventura.

Todo lo mejor para ti Elías. ¡Qué tengas un buen viaje!”

Vielen Dank für alles. Gestern war sehr schön und unvergesslich!!

¡¡Gracias por todo . Ayer todo fue muy agradable y memorable!!

Las imágenes de aquellos momentos son increíbles.

¡Hasta pronto Elías!