Durante el pasado fin de semana, se llevó a cabo el Congreso de Semana Santa y Ciudades Patrimonio de la Humanidad, donde se reunieron representantes de las 15 ciudades españolas que ostentan este prestigioso reconocimiento. Un evento que congregó a expertos en patrimonio cultural con el propósito de intercambiar conocimientos y buenas prácticas relacionadas con la celebración de la Semana Santa, un momento que no solo simboliza fervor religioso, sino también un significativo impulso económico y turístico para estas ciudades.
Entre las figuras destacadas se encontraba Marta Tirado, concejal de Turismo y Patrimonio Histórico, quien compartió valiosas experiencias sobre la gestión de su municipio durante uno de los eventos más importantes en el calendario cultural y religioso. La presencia de Tirado subrayó el interés de su ayuntamiento por seguir impulsando y promocionando el patrimonio cultural de su ciudad, apostando por un turismo responsable que garantice el disfrute inclusivo y respetuoso de las festividades.
El congreso hizo hincapié en la relevancia del trabajo colaborativo entre las ciudades, promoviendo el intercambio de estrategias para fortalecer los valores culturales y capitalizar el potencial económico que ofrece la Semana Santa. Todo bajo un marco de respeto y promoción del patrimonio que les ha dado su estatus de Patrimonio de la Humanidad. Este encuentro refuerza la identidad cultural de estas ciudades, a la vez que reafirma su compromiso con la preservación de sus tradiciones en un mundo cada vez más influenciado por la modernidad y la globalización.
La concurrencia de visitantes, tanto nacionales como internacionales, convierte a la Semana Santa en una época de especial atractivo turístico en las localidades de Patrimonio de la Humanidad. Aquí reside el reto constante de manejar esta afluencia de manera equilibrada, conjugando la promoción turística con la conservación del patrimonio histórico y cultural.
Con la celebración de este congreso, se espera dar un nuevo impulso a las celebraciones de Semana Santa. El objetivo es asegurar su sostenibilidad y transmitir su riqueza cultural a las generaciones venideras, consolidando su legado en un entorno en continua evolución.
