Este fin de semana en Toledo, el Partido Socialista Obrero Español de Castilla-La Mancha (PSCM-PSOE) llevó a cabo su 13º Congreso Regional, un evento que se centró en reafirmar su compromiso con la igualdad y el progreso. Sergio Gutiérrez, secretario de Organización del PSOE de la región y diputado nacional, inauguró el evento subrayando la importancia de la igualdad como pilar fundamental de las aspiraciones tanto del partido como de Castilla-La Mancha. Bajo el liderazgo de Emiliano García-Page, la comunidad autónoma pretende ser un «faro de progreso» en el contexto político español.
Durante la sesión de apertura, Gutiérrez destacó que la igualdad debe ser entendida más allá de la eliminación de la discriminación por género, sexo u orientación sexual. Producto de esta visión, se busca también asegurar la igualdad de oportunidades entre el medio rural y el urbano, un aspecto crucial para evitar discriminaciones en términos de recursos en comparación con otras comunidades autónomas. Este concepto ampliado de igualdad es visto como indispensable para fortalecer el Estado del Bienestar.
El congreso se diseñó también como un espacio para la colaboración con la sociedad civil, donde diferentes agentes sociales y del Tercer Sector tuvieron un papel protagónico. Gutiérrez expresó el deseo de que esta reunión sea más participativa que introspectiva, incluyendo a representantes de distintos colectivos sociales que inspiren, guíen y exijan acción con miras hacia un futuro más prometedor para la región.
Asimismo, el secretario de Organización elogió la gestión del PSOE regional y de su líder, Emiliano García-Page. Según él, Castilla-La Mancha se ha establecido como un referente en políticas de progreso a nivel nacional, especialmente en contraste con las comunidades dirigidas por el Partido Popular y Vox, a las que describió como marcadas por la inestabilidad y la radicalidad que obstaculizan el avance.
Frente a unos 800 asistentes, el PSOE de Castilla-La Mancha reafirmó su apuesta por consolidar la región como un símbolo de estabilidad, sentido común y moderación, promoviendo políticas que favorezcan la igualdad y el progreso. El congreso, en efecto, ha buscado definir una estrategia ambiciosa que garantice el futuro de Castilla-La Mancha, consolidándola como un modelo de equidad y desarrollo para el resto del país.