En la localidad toledana de Ocaña, la consejera portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, ha defendido con firmeza la postura del ejecutivo regional frente a ciertas fuerzas que, considera, buscan desestabilizar la unidad de la Unión Europea y erosionar los principios democráticos que han guiado el progreso social y económico. Durante su visita a la Fuente Grande, un valioso monumento del siglo XVI, Padilla subrayó el compromiso de la administración liderada por Emiliano García-Page con un modelo moderado y coherente orientado a la mejora de la calidad de vida, la economía y el empleo. Este enfoque, destacó la consejera, se refleja no solo en las acciones locales, sino también en el ámbito nacional e internacional, abogando por los intereses de la región en Bruselas, Madrid y otras comunidades autónomas.
Padilla también mencionó el reciente crecimiento poblacional de Castilla-La Mancha, atribuyéndolo a las condiciones favorables para el desarrollo personal y profesional en la región. En este contexto, citó a Ocaña como ejemplo del éxito alcanzado, al haber incrementado su población en 5,000 personas. Según la consejera, este crecimiento es una muestra clara de que los nuevos residentes eligen establecerse en áreas que ofrecen más y mejores servicios públicos.
En relación a la histórica Fuente Grande de Ocaña, Padilla adelantó que la Consejería de Educación, Cultura y Deportes emitirá próximamente un informe favorable al proyecto del Ayuntamiento local para acometer la segunda fase de su rehabilitación. Este monumento, declarado Bien de Interés Cultural, es considerado una de las más destacadas obras hidráulicas del renacimiento español, diseñada bajo la dirección del arquitecto Juan de Herrera durante la era de Felipe II. La edificación, que exhibe un estilo arquitectónico herreriano, no solo es un símbolo patrimonial, sino que también es un reconocimiento al talento de los artesanos locales que la hicieron posible.
A lo largo de la visita, Padilla estuvo acompañada por el alcalde de Ocaña, Eduardo Jiménez, y otros miembros del consistorio, quienes respaldaron la importancia de continuar con los esfuerzos de conservación y promoción de este tesoro arquitectónico, posicionado como una pieza crucial en la historia y la cultura de la región.