La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha encendido las alarmas sobre el precario estado de los vehículos asignados a los agentes de movilidad en Cuenca. En un revelador comunicado, el sindicato ha señalado la criticidad de la situación, subrayando que uno de los tres automóviles en servicio ha recibido un informe desfavorable en la inspección técnica debido al severo deterioro de sus frenos. Este problema no solo compromete la seguridad de los agentes, sino que también representa un potencial peligro para la ciudadanía en general, según ha manifestado CSIF. Ante esta emergencia, el sindicato ha instado al Ayuntamiento de Cuenca a dar una respuesta urgente para solucionar las carencias actuales.
La problemática se ve acentuada por el hecho de que los agentes están operando únicamente con el mencionado vehículo, ya que los otros dos se encuentran fuera de servicio debido a averías considerables. CSIF ha resaltado la falta de autorización para llevar a cabo las necesarias reformas en la flota, lo que supone un agravante en la coyuntura actual y deja a los profesionales del cuerpo en una situación de vulnerabilidad cada vez mayor.
El sindicato ha demandado medidas inmediatas para corregir lo que ha denominado «graves deficiencias». Además, ha puesto de manifiesto la paradoja de que la fuerza encargada de regular el tráfico y sancionar infracciones viales se vea obligada, bajo las presentes condiciones, a utilizar un coche que no cumple con las normativas vigentes debido a su situación mecánica. Esta paradoja revela preocupantes interrogantes sobre la seguridad y la eficacia del desempeño diario de estos agentes, quienes son vitales para el orden y control del tráfico en la ciudad.
CSIF espera que el Ayuntamiento atienda sus reclamos y se adopten las medidas necesarias para garantizar tanto la seguridad de los agentes como la de los ciudadanos de Cuenca, permitiendo así el normal desempeño de las funciones de regulación del tránsito en la región.