En una reciente reunión con la Comisión de Agua del Partido Popular (PP) en Alcázar de San Juan, Paco Núñez, presidente del PP en Castilla-La Mancha, reafirmó su compromiso de luchar por los intereses hídricos de la región. Destacó la determinación del partido de priorizar el agua de Castilla-La Mancha para sus propios habitantes sobre cualquier otro destino.
Núñez aprovechó la ocasión para reiterar su exigencia de que se implemente el Pacto Regional por el Agua. Aseguró que, a pesar del tiempo transcurrido, no se ha concretado ninguna de las medidas acordadas en dicho pacto. Frente a la convocatoria de una nueva Mesa Regional por el Agua para el 24 de julio, liderada por el presidente regional Emiliano García-Page, Núñez cuestionó su efectividad, expresando sus dudas sobre el propósito de otro encuentro sin acciones previas.
El líder del PP subrayó la importancia de llevar a cabo una auditoría hídrica en Castilla-La Mancha y crear un mapa que identifique las necesidades de agua actuales y futuras. Insistió en que no debería trasladarse agua a otras comunidades autónomas hasta asegurar que se cubren las necesidades hídricas locales, conforme al acuerdo regional existente.
Con una postura contundente, Núñez declaró su disposición a enfrentar cualquier desafío para garantizar el suministro de agua a los agricultores y ganaderos de la región. Recalcó que el Pacto Regional por el Agua es crucial para proteger estos intereses.
Además, Núñez solicitó a Emiliano García-Page que inste al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, a acelerar la implementación de un Plan Nacional del Agua. Sin embargo, dejó entrever su escepticismo sobre la realización de este plan bajo el actual liderazgo, sugiriendo que podría concretarse cuando Alberto Núñez Feijóo asuma la presidencia. Con esto, Núñez no solo hizo un llamado a la acción local sino que también esbozó una visión más amplia a nivel nacional sobre la gestión del recurso hídrico.
