El Rondadías 16. Editorial mayo 2010
Herencia es efervescencia. La primavera ha alterado la sangre de unos y otros y lejos de amedrentarnos con los fantasmas de la crisis y discursos agoreros los herencianos, todos, parece que nos hemos puesto el mundo por montera y aquí y allá hemos empezado a andar, que es como se demuestra el movimiento. Superadas ya las resacas de los carnavales